miércoles, 14 de febrero de 2018

Semana 20, síndrome del nido.


En el ecuador de mi embarazo, hago balance y no puedo ser más feliz. Ya me siento embarazada, siento las pataditas de mi salmonete. Hace un par de semanas parecía un pececito y era una cosa muy tenue, pero ahora si me quedo un ratito en la cama y tengo hambre, él también y no me deja seguir durmiendo.
He pasado un par de semanas nerviosa, por saber si todo iba bien de verdad y por el síndrome del nido que he tenido (y sigo teniendo). Pero dejar las cosas importantes zanjadas me ha dejado mucha paz mental, tanta, que me he vuelto laboriosa y me he fabricado la almohada para embarazadas, esa pitón gigante para dormir, y la verdad es que es muy cómoda. Os digo las cosas que hemos decidido y que me tenían nerviosa por la indecisión:
- Silla del coche: el día que se me ocurrió echar una ojeada a los modelos existentes me dio vértigo, no solo por la cantidad de modelos, si no por la cantidad de prestaciones y por la seguridad tan variada que podían ofrecer. Haré un post dedicado a ello, pero sí deciros que nos hemos decidido por la Recaro Zero. 1 Élite.
- Carrito: esto sí ha sido una auténtica comedura de cabeza. Por la inmensa suerte que tengo de que mis abuelos me lo regalan, he podido mirar otras cosas y no solo el precio, pero aún así ha sido una comedura de cabeza. En cuanto lo tenga en casa haré post detallado del Bebecar HipHop XL.
- Armarios para su habitación: en casa tenemos 3 habitaciones, pero un solo armario en mi dormitorio, y desde hace mucho, es decir, desde que decidimos ser padres pensamos que en vez de poner uno tipo mueble, hacerlo de obra, hemos ahorrado y ya hemos encargado un señor armario para su habitación y para la que en un futuro sería la habitación de su hermanito/a. La obra será un poco lío, pero será el punto de partida para empezar a meter cosas, decorar, etc.
- Guardería: pensaréis "es muy pronto", sí, yo también lo pienso, pero nace en junio/julio, y no puedo llegar en octubre o noviembre a una guardería muy solicitada y decir, "tomar a mi hijo". Es más, hemos ido a una que nos gustaba bastante su situación y los comentarios de conocidos y al verla nos ha gustado más. Quedaban 2 plazas, y había que pagar matrícula para el siguiente curso el mes que viene. Yo me quedé blanca, pero ya está reservada la plaza y una cosa menos de la que preocuparse.
- Cositas varias: tenemos adjudicada la cuna, minicuna, bañera y vigilabebés, y resto de cositas que aprovecharé de amigos y familiares. Que suerte ser de las últimas en tener bebé, vamos a recibir mogollón de cosas, y eso es un ahorro.

- Eco de las 20 semanas. Le vimos ayer, y su tamaño justifica mi tripota, está grande, o "espigado" como dijo la doctora. Tenía todas sus cositas en su sitio y todo funcionaba bien. A pesar de lo tranquila que iba no pude evitar emocionarme, es que su corazón es música para mis oídos...

Reboso felicidad.


Señora S.